Andrés Amorós, en el acto de presentación del libro en Madrid.Muriel Feiner‘Esta tarde, la sombra está que arde/ esta tarde comulga el más ateo/ Esta tarde, Antoñete (Dios le guarde) desempolva la momia del toreo.Esta tarde se mojan los pañuelos/ esta tarde, en el patio de Las Ventas, descumple años Chenel por naturales”.Este es un fragmento del soneto que Joaquín Sabina (“soy cantante por cobardía; yo, en realidad, lo que quería es ser toreo”) dedicó al maestro Antoñete en el año 2000 con motivo de la retirada del torero.Más informaciónSabina es uno de los 78 poetas interesados en la tauromaquia que ha seleccionado Andrés Amorós, catedrático de Literatura y escritor, en una antología titulada Las cien mejores poesías taurinas (El Paseíllo), de reciente publicación.“La poesía es, sin duda, el género más adecuado para expresar la belleza y la complejidad de la tauromaquia”, cuenta el autor en la introducción del libro. Y añade: “Por su riqueza y variedad, la poesía taurina es un mundo verdaderamente atractivo, que abarca desde la lírica más culta hasta los romances, las coplas populares y, ahora, las canciones pop”.En la lista de Amorós figuran desde Alfonso X el Sabio, Gonzalo de Berceo, Luis de Góngora, Lope de Vega, Francisco de Quevedo, Calderón de la Barca o Espronceda, hasta los contemporáneos Antonio y Manuel Machado, Gerardo Diego, García Lorca, Miguel Hernández, Vicente Aleixandre, Rafael Alberti, Gabriel Celaya, Gloria Fuertes o Blas de Otero, los actuales Carlos Marzal, Felipe Benítez Reyes, Luis Alberto de Cuenca, el ganadero Juan Pedro Domecq y Díez, el rejoneador Ángel Peralta, el torero Mario Cabré, el crítico Javier Villán o los cantantes Joaquín Sabina y Andrés Calamaro, entre otros.Cada uno de los poemas va precedido de un comentario sobre el autor y esa obra desde el punto de vista literario y taurino. “El criterio de selección ha sido, ante todo, la calidad del poema”, afirma Amorós; “pero en algún caso era inevitable tener en cuenta también la importancia del poeta: no es desdeñable, por ejemplo, que hayan escrito poemas taurinos Calderón de la Barca, lord Byron o Rilke”.Entre todos los autores elegidos, Amorós afirma que “los más universales son Lorca y Miguel Hernández”, y sobre ambos dijo en la reciente presentación del libro que lo que más le interesa es “cuando trascienden lo costumbrista y lo convierten en un drama humano universal”.“Sobre el Llanto por Ignacio Sánchez Mejías”, que es una obra absolutamente extraordinaria”, —señaló— “hay mucha gente en el extranjero que cree que Sánchez Mejías no existió y que se lo inventó Lorca porque no da detalles concretos”.“He de insistir en algo casi obvio”, escribe Andrés Amorós en su libro, “el toreo es un arte en sí mismo, no necesita de la poesía para transmitir belleza. Pero la buena poesía lo adorna, y puede ayudarnos a descubrir detalles o puntos de vista estéticos”.

Chenel ‘descumple’ años en las 100 poesías taurinas recopiladas por Andrés Amorós | Cultura
Shares: