¿Dónde está Taylor Swift? Las claves de su desaparición pública | Gente

Taylor Swift (Pensilvania, 35 años) lleva copando los titulares desde hace años, pero en los dos últimos ha confirmado que es una de las artistas más importantes de lo que llevamos de siglo XXI. Su gira The Eras Tour se convirtió en la de mayor recaudación de la historia. Las cifras son claras: 22 meses de tour, 149 conciertos —tres de ellos, en Viena (Austria), tuvieron que ser cancelados por una amenaza da atentado terrorista—, 10 millones de espectadores y 2.000 millones de dólares de ingresos. En casi dos años, la intérprete de Karma llevó su música, su historia y sus más de tres horas de concierto por casi todo el mundo. Cada paso que daba era motivo de noticia, llegando a ser molesto para aquellos que no eran seguidores. Y, de repente, desapareció.La cantante y compositora finalizó el pasado 8 de diciembre en Vancouver, Canadá, la interminable gira con la que hacía un repaso por sus 19 años de carrera. Desde aquella cita han pasado 123 días, y, en este tiempo, solo se ha dejado ver en siete ocasiones y solo una de ellas profesional (ninguna de ellas en marzo): cuatro de ellas para mostrar su apoyo a su novio, el deportista Travis Kelce, durante los partidos de fútbol americano de finales y comienzos de año; otras dos de cena por Nueva York, y, la más importante, en la celebración de los premios Grammy. Además, desde el 12 de diciembre no actualiza sus redes sociales. Así que muchos se preguntan: ¿dónde está Taylor Swift y a que se debe su inesperado retiro?Más informaciónSus seguidores, acostumbrados a buscar easter eggs —o huevos de Pascua, como llaman a las pistas que adelantan sus siguientes movimientos— en cada una de sus apariciones, han planteado infinitas posibilidades sobre los motivos de su retiro: descanso, preparar el nuevo disco, pasar tiempo en pareja… y, la más repetida, el inminente lanzamiento de la regrabación de Reputation, uno de los últimos discos robados que le quedan por publicar y uno de los más significativos de su carrera. Este sexto álbum de estudio, que vio la luz en 2017 —y que anunció de un día para otro tras meses alejada de los focos—, está inspirado en su historia personal y en cómo afrontó las críticas tras su conflicto público con Kanye West y Kim Kardashian. Esta teoría también se une al hecho de que si no publica un disco en los próximos meses, será la primera vez en seis años que no esté nominada a ningún premio Grammy. Además, la fecha límite para poder lanzar sus discos Taylor Swift (Taylor’s Version) y Reputation (Taylor’s Version) es el próximo mes de agosto, después de que se le concediese la autorización de uso para ambos nombres. Pero, oficialmente, no se conocen los motivos de esta ausencia deliberada.Taylor Swift acude a un partido de los Kansas City Chiefs, el equipo de su pareja, Travis Kelce, el 7 de octubre de 2024.David Smith (ZUMAPRESS.com / Cordon Press)“Taylor simplemente está disfrutando de un tiempo a solas con Travis y pasando desapercibida por un tiempo”, aseguró una fuente cercana a la artista al medio estadounidense Page Six. Desde que dio por finalizada su histórica gira, se sabe que la pareja ha disfrutado de unas vacaciones fuera de Estados Unidos —se desconoce el destino, pero se habla de Europa y de algunos lugares paradisiacos—. “Ambos quieren descansar y desconectar. Ninguno tiene compromisos importantes por delante”, apuntó otra fuente. Era ya una tradición ver al deportista viajando allí donde la cantante tenía eventos, y viceversa, pero la temporada regular de la liga de fútbol americano no comienza hasta septiembre, y no hay conciertos o lanzamientos programados.Se esperaba que estos primeros meses de año fueran su confirmación como una de las parejas más observadas de Estados Unidos. En época de premios y de finales deportivas, muchas eran las voces que aseguraban que Swift y Kelce iban a protagonizar su primer posado oficial en una alfombra roja tras año y medio de romance. Algo que por ahora no ha ocurrido y los últimos acontecimientos, poco afortunados, en sus respectivos campos laborales podrían ser la razón: los Kansas City Chiefs —equipo de fútbol americano en el que juega él— perdieron la final de la Super Bowl frente a los Philadelphia Eagles de manera abultada; una semana antes, la cantante se iba de vacío en los Grammy pese a estar nominada en seis categorías.La catalogada por muchos como “la semana negra”, no terminó aquí. Durante el evento deportivo, que congregó a más de 120 millones de telespectadores solo en Estados Unidos, la de Pensilvania fue abucheada justo cuando las cámaras la enfocaron. Su cara mostró tres emociones al mismo tiempo: sorpresa, risa y enfado. Dos eran los posibles motivos detrás de esta reacción del público: la culpaban del mal juego de los Chiefs, como si ella estuviese en el terreno de juego; y los seguidores de Trump —con el presidente estadounidense presente en el estadio, algo único en una final— mostraban su rechazo al claro respaldo de la cantante a Kamala Harris durante la contienda presidencial de 2024.Taylor Swift y Travis Kelce durante una actuación de ‘The Eras Tour’ en el estadio de Wembley, en Londres, el 23 de junio de 2024.Gareth Cattermole/TAS24 (Gareth Cattermole/Getty Images for TAS Rights Management)Desde esa final nada se ha vuelto a saber de ella: solo ha enviado vídeos de agradecimiento en aquellas galas de premios en las que ha resultado ganadora, como la del iHeartRadio. Ni siquiera se le ha visto en sus habituales salidas gastronómicas por Nueva York y está por ver que es lo que sucede el próximo 5 de mayo, cuando se celebra la mediática gala del Met. Ella ha acudido a esta cita en cinco ocasiones, la última de ellas en 2016, en la que conoció a su expareja, Joe Alwyn. Sin embargo, este año, al estar centrada la temática en el dandismo de los hombres negros, no está tan claro que aparezca.La desaparición de la cantante no solo importa a sus seguidores, que ya reclaman un nuevo lanzamiento —el próximo 19 de abril se cumple un año del último—, ya que en estos últimos años, Swift ha estado malacostumbrándoles publicando hasta dos regrabaciones con pocos meses de diferencia. El pasado lunes 7 de abril, la poeta Kimberly Marasco explicó en una entrevista Newsweek que estaba teniendo serias dificultades para localizarla y hacerle llegar una notificación de demanda por presunto plagio en la que pide 30 millones de dólares. Según defiende, pese a que ya ha sido desestimada la reclamación en una ocasión, la artista y su equipo copiaron su trabajo en canciones y vídeos de Lover, Folklore, Midnights y The Tortured Poets Departments; así como coreografías en The Eras Tour.Taylor Swift, durante su actuación de ‘The Eras Tour’, el 29 de mayo de 2024, en Madrid. Xavi Torrent/TAS24 (Getty Images for TAS Rights Management)En los últimos meses, la intérprete de Shake It Off también se ha visto implicada involuntariamente en la guerra pública que protagonizan su hasta ahora amiga Blake Lively y Justin Baldoni, después de que la actriz demandase a su compañero de reparto en Rompiendo el círculo por acoso sexual. El también director de la película acusó a Lively de usar la influencia de su entorno [Swift y su marido, Ryan Reynolds] para controlar el proceso creativo del proyecto. Afirma que le invitó a su ático de Nueva York para repasar el guion y proponerle nuevas modificaciones y que, al llegar, se encontró a la cantante y al actor, a quienes se cita en su demanda como Los dragones en referencia a Juego de tronos. Sin quererlo, pasó a formar parte de un enfrentamiento que llegará a los tribunales en 2026. Fuentes cercanas a la de Pensilvania han asegurado a medios estadounidenses que se sintió “utilizada” porque se estaban “aprovechando de su nombre”. Pero parece que en los últimos días las aguas han vuelto a la calma y la intérprete, según recoge Page Six, se disculpó con ella: “Para Blake era importante volver a estar en buenos términos con Taylor. Nunca fue su intención lastimarla ni perjudicar su amistad”.64 días de su última aparición pública, 119 días de su última publicación en Instagram —solo ha reaparecido en stories para enviar un mensaje de apoyo a las víctimas de los voraces incendios de Los Ángeles y para promocionar el disco de una de sus mejores amigas Selena Gomez—, 149 días de su último mensaje en X, 181 días de su último TikTok, 293 días de su último single y 436 días de su último anuncio. Quizá simplemente después de vivir uno de los años más cargados de trabajo, Taylor Swift necesitaba un descanso de todo, y de todos. Y tiene millones en el banco para permitírselo.